Tengo un problema ... soy adicta a la heroína y la cocaína

Hola. Soy una muchacha de veintisiete años. Vengo de Italia. De Módena.

Tengo un problema ... soy adicta a la heroína y la cocaína. Desde hace años que me drogo. He probado diversos métodos de curación en otros lugares y clínicas, pero para decirlo así, no lograron que dejara de hacerlo, porque nunca hice una introspección verdadera. 

Hallé este sitio a través del Internet, con la ayuda de mi novio y mis padres, y empezamos a leer y buscar información sobre los tipos de tratamiento que ofrece esta clínica. Aquí empecé el proceso de desintoxicación, es decir de purificación, para continuar después con el tratamiento de ibogaína y al principio era un poco escéptica porque pensaba que todo esto era solamente, para decirlo así, una cosa divertida, una experiencia agradable, sin embargo, en la realidad, una vez hecho el tratamiento, empecé a comprender mejor las cosas, porque medité sobre ellas durante la noche y el día siguiente, cuando emociones muy fuertes emergen a la superficie.

Puedo decir que esa fue una de las primeras veces que logré escucharme a mí misma con sinceridad, porque por lo general me mentía a mí misma y me decía que quería detenerme, cuando en realidad ni me importaba.

Después de esta experiencia, yo quede... fue una experiencia muy difícil, porque el tratamiento dura seis horas, seis largas horas que requieren mucha fuerza para enfrentarse con ellas.

Las primeras horas... son, por decirlo así, divertidas, agradables, pero después la sustancia comienza a accionar en tu cabeza, porque te enfrenta constantemente con los problemas impuestos por el cerebro, con problemas, de los que ni siquiera eres consciente, porque durante la vida diaria no muestras aquello que inhibes.

Y cuando se terminó, fui examinada, porque todo este proceso se efectúa bajo estricta supervisión médica.

Verifican el funcionamiento del corazón y la presión para asegurarse de que estás bien y que no tienes problemas con tu organismo.

Y cuando se terminó, durante la noche, como tienes todavía esa sustancia en el torrente sanguíneo, tu cerebro sigue procesando todas las cosas que has visto.

Y fue a partir de ese momento me di cuenta de muchas cosas, y esa noche tuve sueños que me permitieron entender cosas que nunca había entendido.

El día siguiente fue para ventilar el cerebro y pensar nuevamente sobre muchas cosas equivocadas de mi pasado, Me arrepentí y lloré todo el día, pero no eran lágrimas de tristeza, sino más bien, eran lágrimas de una persona que se dio cuenta de los errores que cometió.

Después de ese momento, por decirlo así, de dolor, comienzas a pensar en que debes concentrarte en las cosas positivas, en tu vida y tu futuro.

Entonces empiezas a sentir cierta paz interior. Al menos eso era lo que sentía. En ese momento tenía una sensación de estar en paz conmigo misma y me sentía lista para enfrentarme  nuevamente con la vida.