Síntomas abstinencia de la heroína
Abstinencia de la heroína
Dependencia física. La tolerancia y el síndrome de abstinencia.
Además de la adicción psicológica, el adicto a la heroína desarrolla rápidamente adicción física a la droga, la cual se caracteriza por el crecimiento de la tolerancia a la droga y la aparición del síndrome de abstinencia. La tolerancia es definida como la necesidad creciente de dosis cada vez más altas del fármaco para lograr el efecto eufórico deseado. Esto significa que el organismo se acostumbra a los efectos de la heroína. Eventualmente se llega a un punto, en el cual el efecto eufórico de la heroína desaparece, pero el organismo se ha acostumbrado a tener la droga presente en su sistema y la necesita para funcionar "normalmente". Si el consumidor deja de tomar heroína regularmente, el mismo comenzará a experimentar síntomas del síndrome de abstinencia.
El síndrome de abstinencia de la heroína puede comenzar tan pronto como cuatro-seis horas después de la última dosis, cuando el consumido empieza a sentirse irritable, ansioso, nervioso, a medida que la droga sale del cuerpo. El síndrome de abstinencia puede tardar hasta 12 días, con el pico de intensidad alrededor del cuarto día, y empieza a desvanecerse por ahí del noveno día. Aunque por lo general no representa un peligro para la vida, el síndrome abstinencial de la heroína es una condición dolorosa y muy estresante, lo cual le dificulta al consumidor renunciar a su adicción. Los síntomas más frecuentes de abstinencia física incluyen: pupilas dilatadas, dolor intenso en los músculos, espalda, piernas y articulaciones; náuseas y vómitos, calambres estomacales, diarrea, escalofríos y piel de gallina, sudoración, secreción nasal, ojos llorosos, bostezos; inquietud e insomnio extremo. Los espasmos musculares en las piernas hacen que las mismas den patadas. Las patadas son un síntoma muy típico de la abstinencia de opiáceos. Los síntomas psicológicos incluyen ansias, disforia, depresión y un ansia insoportable por la heroína.
En una semana la mayoría de los síntomas abstinenciales desaparecen, pero el paciente suele experimentar cierta debilidad residual y dolor emocional, caracterizado por un sentimiento de culpabilidad y vergüenza. El paciente presente cambios frecuentes de humor, irritabilidad, trastornos del sueño y sudores nocturnos. A nivel mental o emocional, el síndrome de abstinencia dura varias semanas. Frecuentemente, el sufrimiento emocional es demasiado intenso y el mismo representa la principal causa de recaída.
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